Los reds han de ganar para seguir pensando en el título y los spurs necesitan los tres puntos para continuar aspirando a un Top 4 que el Chelsea espera afianzar y que ya está casi imposible para el United.
Anfield acogerá el partido más decisivo de esta jornada de la Premier League entre dos equipos que ya se repartieron los puntos el pasado diciembre, pero tampoco podemos perder de vista las citas de este sábado en Stamford Bridge y el Falmer Stadium.
El Liverpool está muy cerca de firmar una temporada para la historia porque puede acabar como campeón de la Premier League, la Champions League, la FA Cup y la EFL Cup. Sin embargo, de momento solo tiene el último de esos cuatro títulos, el menos relevante del lote, por lo que cada uno de sus seis últimos partidos del curso serán absolutamente decisivos y necesita ganarlos todos.
Cuatro días después de certificar su pase a la final de la Champions, los de Jürgen Klopp deben ahora recibir al Tottenham en un duelo de alto voltaje. El precedente en el norte de Londres acabó 2-2 en un partido muy intenso: Harry Kane abrió el marcador y Diogo Jota puso las tablas antes del descanso, pero en la segunda parte Andre Robertson puso al Liverpool por delante poco antes de ver la roja directa, aunque entre medias Son Heung-min tuvo tiempo de marcar el gol del empate.
Los reds encadenan seis victorias consecutivas y solo han perdido uno de sus 29 últimos partidos, mientras que el Tottenham ha ganado cinco de sus siete citas más recientes y todo lo que no sea un triunfo este sábado podría complicarle en exceso sus opciones de acabar en el Top 4.
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Durante meses se ha dado por supuesta la presencia del Chelsea en la próxima edición de la Champions, pero sus márgenes ya no son tan amplios tras haber ganado solo dos de las seis últimas jornadas ligueras. El 1-0 del pasado domingo en el campo del Everton evidenció la crisis de los blues y un nuevo tropiezo este sábado podría ponerle en un serio aprieto.
Teóricamente no debería tener problemas al jugar en casa contra un Wolverhampton que suma tres derrotas consecutivas sin siquiera marcar un gol, pero los de Thomas Tuchel no pueden confiarse. Los wolves ya puntuaron las tres últimas veces que se toparon con el Chelsea, incluyendo el 0-0 de la primera vuelta en el Molineux Stadium, y todavía aspira a meterse en Europa. Además, esta temporada han dado también alguna sorpresa a domicilio, al ser capaces de ganar en sus visitas al Tottenham (0-2) y al Manchester United (0-1).
Los red devils están prácticamente fuera de la pelea por el Top 4 y, aunque parece improbable que se caigan también de la próxima edición de la Europa League, les conviene certificar ese objetivo lo antes posible. El 3-0 del lunes ante el Brentford supuso una inyección de moral, después de que se habían quedado sin victoria en seis de sus siete partidos anteriores, pero este sábado afrontan un complicado examen en el Falmer Stadium.
El United ha perdido los cuatro últimos partidos que ha jugado fuera de casa, con 12 goles encajados y solo dos a favor. En cambio, la única derrota que ha sufrido el Brighton durante las seis últimas jornadas fue la de su visita al Manchester City (3-0) y durante ese tiempo ha logrado vencer a rivales como el Arsenal (1-2) o el Tottenham (0-1), precisamente los dos equipos ubicados justo por delante de los de Ralf Rangnick.
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