La franquicia dirigida por Steve Kerr logra su cuarto título en ocho años tras superar a los Celtics en el sexto partido de las Finales de la NBA (90-103), firma una de las mejores rachas de la historia y encumbra a Curry con su primer MVP en esta fase decisiva.
Los Golden State Warriors han cumplido con los pronósticos y han conquistado un anillo al que llegaban como candidatos desde los primeros compases de la temporada regular, demostrando ambición durante toda la campaña y experiencia en los partidos importantes de los playoffs. Este es su cuarto título en ocho años, algo que se traduce en una de las rachas ganadoras más importantes de la NBA y les convierte en la tercera franquicia más galardonada de la historia.
Equipos con más títulos de la NBA:
- 1º: Los Angeles Lakers (17 títulos y 15 subcampeonatos)
- 2º: Boston Celtics (17 títulos y 5 subcampeonatos)
- 3º: Golden State Warriors (7 títulos y 5 subcampeonatos)
- 4º: Chicago Bulls (6 títulos)
- 5º: San Antonio Spurs (5 títulos y 1 subcampeonato)
Los de Steve Kerr terminaron la primera fase de la competición en la tercera posición de la Conferencia Oeste, superaron a los Denver Nuggets en la primera ronda (4-1), a los Memphis Grizzlies en las Semifinales de Conferencia (4-2) y a los Dallas Mavericks en las Finales de Conferencia (4-1). Por lo tanto, los Warriors se metieron en las Finales de la NBA con un balance de 12 victorias y cuatro derrotas, unos números que dejaban entrever su potencial y su buena actitud en los partidos a domicilio.
Esta tendencia se ha mantenido contra unos Boston Celtics que han ido de más a menos durante estos días, pero a quienes les ha terminado pasando factura el desgaste físico y sus malos números en el TD Garden. Los de Ime Udoka no tuvieron unos playoffs sencillos a pesar de terminar segundos en la Conferencia Este, debido a que se tuvieron que enfrentar a los Brooklyn Nets (4-0), a los Milwaukee Bucks (4-3) y a los Miami Heat (4-3).
Sin embargo, superaron a todos estos rivales para citarse con la historia en las Finales de la NBA, aunque finalmente les ha jugado una mala pasada. Los Celtics arrancaron con actitud, pero han terminado encajando tres derrotas consecutivas, Jayson Tatum no ha brillado tanto como se esperaba y Stephen Curry ha marcado una diferencia abismal sobre la pista.
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El base estadounidense ha sido, sin ninguna duda, el mejor jugador de estas Finales de la NBA. Nunca había logrado este reconocimiento a pesar de tener otros tres anillos (2015, 2017 y 2018), ostentar el mejor porcentaje de aciertos de tiros libres, contar con el récord de triples anotados durante una temporada o haber sido nombrado MVP de la temporada regular en dos ocasiones (2015 y 2016).
Los números durante toda la serie avalan este galardón para Curry (un promedio de 31,2 puntos, seis rebotes y cinco asistencias), el único importante que le faltaba en su carrera deportiva tras ser nombrado MVP del All-Star Game de la NBA hace unos meses y superar. Ahora, habrá que ver si el jugador mantiene la ambición y vuelve a llevar a su equipo hacia lo más alto, repitiendo título como sucedió hace cuatro años.
Estadísticas de Stephen Curry en las Finales de la NBA:
- Primer partido: 34 puntos, cinco rebotes y cinco asistencias.
- Segundo partido: 29 puntos, seis rebotes y cuatro asistencias.
- Tercer partido: 31 puntos, cuatro rebotes y dos asistencias.
- Cuarto Partido: 43 puntos, 10 rebotes y cuatro asistencias.
- Quinto partido: 16 puntos, cuatro rebotes y ocho asistencias.
- Sexto partido: 34 puntos, siete rebotes y siete asistencias.
Los Golden State Warriors tienen un próximo objetivo a corto plazo, ya que si conquistan el anillo durante la siguiente temporada igualarían la racha de Los Angeles Lakers en 1980 y 1988. En ese periodo de tiempo levantaron cinco títulos, algo que emularían los de Steve Kerr para seguir impregnando su sello en la historia de este deporte.
Por supuesto, todavía seguirían por delante los Chicago Bulls con sus seis anillos entre 1991 y 1998, al mismo tiempo que los Boston Celtics conquistaron ocho consecutivos entre 1959 y 1966. Aun así, la competitividad ha aumentado exponencialmente en la NBA, así que este tipo de gestas tiene un mérito muy similar.
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